Génesis 3:15 Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar.
La serpiente, al ser usada como una herramienta por parte de Satanás, justo ha engañado a Eva. Dios viene y le da la promesa a Eva que su simiente herirá la cabeza de Satanás o le impondrá una herida fatal.
¡Puede imaginar lo que cada chica piadosa soñó hasta María! ¿Podría ser yo la que Dios escoja para enviar la promesa – El Mesías?
Luego un día el ángel se apareció y dijo.
Lucas 1:28 …!Salve, muy favorecida! El Señor es contigo; bendita tú entre las mujeres.
Lucas 1:30 Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia delante de Dios.
Lucas 1:31 Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS.
La promesa finalmente se había hecho realidad. Dios había bendecido a la humanidad femenina. Ella podría haber causado la caída pero ahora era bendecida por Dios para dar a luz al Salvador y al único que pondría a Satanás bajo Sus pies.
De manera sorprendente Dios rescata y bendice a los caídos. No estaba basado en la bondad de María sino en la gracia de Dios.
Usted puede saber en su fracaso más grande que si desea y se vuelve al Señor Jesucristo, el Salvador, Él traerá bendiciones del fracaso.
¡Qué promesa, qué Salvador! ¡Feliz Navidad a todos y cada uno de ustedes!
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